El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, indultó a su hijo Hunter, una movida que contraviene su promesa previa de no utilizar su cargo para beneficiar a familiares. Este indulto evita que Hunter enfrente penas de prisión por delitos de posesión ilegal de armas y fraude fiscal. La medida se produce poco antes de la inminente toma de posesión de Donald Trump, quien podría haber complicado el panorama judicial de Hunter. Biden justificó su decisión alegando un procesamiento con motivaciones políticas. Anteriormente, la Casa Blanca había descartado cualquier clemencia, pero la situación cambió tras la victoria electoral de Trump. La decisión es vista como un intento de proteger a su hijo de un proceso que considera injusto, paralelo a las tácticas de Trump. La familia Biden ha permanecido unida en este difícil episodio, marcando el fin de un proceso legal complejo que comenzó poco después de la victoria electoral de Biden en 2020.
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