Cada verano, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, elige el Palacio Real de La Mareta en Lanzarote como su destino vacacional. Esta lujosa residencia, localizada en Costa Teguise, fue un obsequio del Rey Hussein de Jordania al Rey Juan Carlos I y ahora es uno de los enclaves más exclusivos para altos cargos en España. Con más de 30,000 metros cuadrados, La Mareta cuenta con un edificio principal, bungalows independientes, jardines diseñados por César Manrique, y múltiples instalaciones recreativas. Desde 2015, se ha utilizado para promover la Marca España, ofreciendo una experiencia de lujo a dignatarios internacionales. Sánchez disfruta del lugar por su privacidad, entorno natural y simbolismo institucional, lo que encaja con la estrategia de impulsar el turismo de alto nivel.
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