Durante un evento celebrado en la Universidad Europea de Madrid, expertos destacaron la importancia de integrar la privacidad desde el diseño en la tecnología, subrayando los riesgos de depender excesivamente de sistemas tecnológicos sin el control humano adecuado. Gonzalo de la Poza García, de acens, enfatizó que el Reglamento General de Protección de Datos (RGPD) debe entenderse como un marco para proteger a las personas en la era digital, en lugar de solo una norma de cumplimiento.
De la Poza señaló que, ante cualquier brecha de seguridad, las notificaciones a la autoridad competente deben realizarse en un plazo de 72 horas, con sanciones que pueden alcanzar los 20 millones de euros o el 4% de la facturación anual de la empresa. También resaltó la responsabilidad compartida de proteger los datos dentro de las organizaciones.
En el ámbito educativo, Edith Macedo y Hubert Joo Kitano de la UEM discutieron sobre Big Data y FinTech, resaltando que estos sectores están sujetos al RGPD. Macedo mencionó ejemplos como Airbnb, donde la regulación ha impulsado prácticas de anonimización de datos. Kitano advirtió que la confianza en FinTech puede verse comprometida por una sola brecha de seguridad, instando a un manejo adecuado de datos sensibles.
Ambos expertos coincidieron en que el mayor riesgo sigue siendo el humano, subrayando la necesidad de educación y formación en protección de datos dentro del currículum de futuros profesionales.
La conclusión principal fue la urgencia de integrar la protección de datos desde el diseño de cualquier iniciativa digital, especialmente en sectores donde la reputación es fundamental. La ética y la regulación deben caminar de la mano con el avance tecnológico para proteger no solo datos, sino también a las personas detrás de ellos.