El magistrado ha determinado que el riesgo de destrucción de pruebas, que fue la razón principal para el encarcelamiento de una persona el pasado 30 de junio, se ha «seriamente mitigado». Esta decisión podría influir en la situación legal del individuo, aunque aún se esperan detalles sobre cómo afectará su futuro procesal. La evolución del caso sigue siendo de interés público, a medida que se desarrollan más audiencias y se revelan nuevos detalles en el proceso judicial.
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