El Tribunal Supremo ha establecido un precedente significativo en la legislación laboral española con su reciente sentencia del 18 de noviembre, que obliga a las empresas a realizar un trámite de audiencia previa antes de llevar a cabo un despido disciplinario. Este cambio normativo refuerza la protección de los trabajadores, garantizando su derecho a ser escuchados antes de que se decida su despido por razones disciplinarias.
La decisión se basa en el artículo 7 del Convenio 158 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), un convenio que España ratificó en 1986, el cual establece el derecho fundamental de los trabajadores a ser oídos. Hasta ahora, en la mayoría de los casos, las empresas podían despedir a los empleados de manera disciplinaria sin una audiencia previa, exceptuando ciertas circunstancias específicas estipuladas por convenios colectivos o involucrando a representantes legales de los trabajadores.
El Tribunal Supremo ha considerado que no realizar este trámite de audiencia vulnera los derechos fundamentales relacionados con la dignidad y la protección laboral. Por lo tanto, ha adoptado una perspectiva más protectora, abogando por el derecho a una defensa previa como un principio general, aunque el fallo deja espacio para algunas excepciones que aún no se han delimitado.
Es importante destacar que, según explicó Carles Valoira de Valoira Abogados, esta interpretación judicial no será retroactiva. Los despidos efectuados antes del veredicto no estarán sujetos a esta nueva regla. Sin embargo, a partir de ahora, cualquier despido que se realice sin la previa audiencia del trabajador será considerado automáticamente improcedente. Esto impulsa a las empresas a ajustar sus protocolos y a adaptar sus prácticas a las nuevas exigencias normativas.
La sentencia enfatiza la necesidad de que las empresas incorporen una fase de audiencia previa en sus procedimientos disciplinarios para asegurar el derecho de defensa de los empleados y minimizar así el riesgo de litigios por despidos improcedentes. Valoira Abogados recalca la importancia de que las empresas cuenten con un asesoramiento laboral adecuado y actualizado para implementar correctamente estas disposiciones y garantizar que sus prácticas disciplinarias sean legales y justas.
Este cambio normativo supone una transformación crucial en la manera en que se manejan los despidos disciplinarios en España, protegiendo mejor a los trabajadores y promoviendo una mayor equidad en las decisiones de despido por parte de las empresas.