En el pintoresco y pequeño municipio de Dixville Notch, New Hampshire, conocido por ser el primer lugar de Estados Unidos en emitir votos durante las elecciones presidenciales, Kamala Harris y Donald Trump empataron con tres votos cada uno. Con una participación total de solo seis votantes, los resultados del proceso electoral, llevado a cabo en un hotel fuera de servicio, se contaron en apenas 15 minutos. Esta tradición se ha mantenido debido a la escasa población de la zona, lo que permite que la jornada comience a medianoche y concluya poco después.
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