Alicante se consolida como la cuarta provincia española con mayor número de empresas activas, registrando 140.468 según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE). Este dato, aunque refleja una economía local dinámica, presenta un reto considerable: cerca del 18% de estas empresas, unas 25.200, tienen más de 20 años de actividad y podrían estar acercándose a un punto crítico en cuanto al relevo generacional se refiere.
Los estudios recientes, como el titulado «Relevancia y Supervivencia de la Empresa Familiar en España 2025» y el «INFORME PYME 2025», elaborados por FAED PYME y el Consejo de Economistas, señalan que la vida media de las PYMES familiares en el país se encuentra entre los 23 y 28 años. Ambos estudios advierten que al alcanzar las dos décadas, las empresas afrontan una fase decisiva que podría ser particularmente desafiante en Alicante. En 2024, de las 6.240 pequeñas y medianas empresas activas, al menos 1.100 estarían en peligro si no logran superar su primer ciclo de sucesión.
Uno de los factores que agravan este riesgo es que el 63% de las empresas familiares en España, incluidas muchas en Alicante, dependen de un único accionista. Esto aumenta la posibilidad de discontinuidad cuando el fundador o principal directivo se acerca a la jubilación.
El perfil demográfico de los empresarios muestra una tendencia hacia el envejecimiento, donde la generación del Baby Boom se aproxima al retiro, y con ello crece la inquietud por la falta de planes de sucesión, como apunta Olivier Lamotte, cofundador de TEC Capital. La ausencia de estos planes se evidencia en que el 35% de las PYMES podrían poner en riesgo no solo su continuidad, sino también los empleos de 253.917 personas en la provincia, según afirma Pepe Corral, también cofundador de TEC Capital.
El desinterés o la falta de preparación de las siguientes generaciones para asumir la dirección de estas empresas agrava la situación, provocando posibles conflictos internos y subrayando la necesidad de una planificación sucesoria adecuada.
Ante este panorama, se están explorando alternativas como el Management Buy Out (MBO), el Management Buy In (MBI), y los Search Funds o Fondos de Búsqueda. Esta última estrategia ha ganado relevancia recientemente, permitiendo a emprendedores adquirir PYMES establecidas para guiarlas hacia una nueva etapa de expansión. TEC Capital, liderada por Lamotte y Corral, aplica esta metodología, centrando sus esfuerzos en adquirir empresas con un EBITDA superior al millón de euros, con el fin de trabajar junto a sus propietarios en una transición a medida, fortalecida por su experiencia en gestión, digitalización e internacionalización, garantizando así la continuidad y crecimiento de la empresa.
Con el apoyo de un selecto grupo de inversores nacionales e internacionales, TEC Capital se posiciona de manera consolidada para ayudar a enfrentar los desafíos y aprovechar las oportunidades del entorno empresarial alicantino, promoviendo su continuidad y desarrollo a largo plazo.
