En una noche tensa en Madrid, agentes de la Unidad de Intervención Policial (UIP) cargaron contra manifestantes cercanos a la sede del PSOE en Ferraz, durante una protesta que marcó el aniversario de las movilizaciones contra la ley de amnistía. Alrededor de 2.000 personas participaron en la marcha, algunos de ellos intentando derribar vallas y lanzando objetos a la policía, quien respondió con balas de goma para dispersarlos. El PSOE condenó la violencia, señalando la presencia de comportamientos fascistas por parte de los manifestantes, y enfatizó su compromiso con la defensa de la democracia, instando al Partido Popular a hacer lo mismo. Mientras tanto, en Valencia, no se implementó un cordón de seguridad similar en torno al Palau de la Generalitat.
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