España se perfila como una de las economías más destacadas de Europa para el año 2025, con un crecimiento proyectado del Producto Interior Bruto (PIB) del 1,9%, duplicando así el ritmo previsto para la Eurozona, que se quedará en un 0,9%. Este prometedor avance, reflejado en el informe “Economic Outlook 2025” del Instituto Económico de Mastercard (MEI, por sus siglas en inglés), posiciona a España a la vanguardia del dinamismo económico en un escenario global de recuperación.
Aunque el crecimiento global se espera que alcance un 3,2% en 2025, España sobresale por su capacidad para mantener la inflación en torno al 2% y conservar un consumo robusto, pese a políticas fiscales estrictas a nivel comunitario y la incertidumbre del comercio internacional.
El análisis de Mastercard, que abarca 74 mercados globales, identifica cinco factores clave que influirán en el entorno económico de Europa y, especialmente, de España en 2025. En primer lugar, la ligera aceleración en Europa, donde la inflación empieza a estabilizarse, proporciona a España un margen mayor para el crecimiento gracias a un equilibrio entre tipos de interés bajos y políticas fiscales ajustadas.
En segundo lugar, destaca la resiliencia en el consumo español, impulsada por un aumento pronosticado del 2% en el gasto de los hogares, sustentado por bajos niveles de desempleo y un alivio de las presiones hipotecarias debido al descenso de los tipos de interés. Esta tendencia refleja la confianza de los consumidores, esencial para el desarrollo económico sostenido.
El sector turístico también presenta novedades significativas, con nuevos patrones que emergen a medida que los viajeros europeos optan por destinos más asequibles y menos saturados. Ciudades como Sevilla y Valencia están ganando protagonismo, reflejando un cambio en las preferencias turísticas en detrimento de Madrid y Barcelona. Al mismo tiempo, el gasto en experiencias, como la gastronomía y el turismo, sigue siendo esencial para los consumidores, superando el interés por los bienes duraderos.
Otro factor crucial es el auge de la ‘SHEconomy’ en España, con un significativo aumento de la tasa de actividad femenina, que ha crecido un 1,43% entre 2019 y 2023. Este fenómeno, potenciado por la flexibilidad laboral y el incremento de oportunidades en sectores como la sanidad y la educación, fortalece el mercado laboral y dinamiza el consumo.
A pesar de estas mejoras, el informe destaca aún una cierta moderación en la sensibilidad al precio en sectores como la restauración y el turismo, con un crecimiento del 4,8% en el gasto de restaurantes tradicionales, mientras que el sector de la moda sigue viendo un preferencia por opciones más económicas.
Natalia Lechmanova, economista jefe para Europa del MEI, subraya que a pesar de un crecimiento económico modesto en Europa, los consumidores seguirán siendo el principal motor económico gracias a la recuperación del poder adquisitivo. Juan Pablo Vivas, director general de Mastercard España, asegura que el comportamiento del consumo, especialmente en el turismo y la restauración, proyecta una tendencia positiva para el próximo año.
El informe “Economic Outlook 2025” de Mastercard perfila un escenario optimista para España basada en un sólido consumo y una economía diversificada, posicionando al país como un referente económico en la Eurozona. Estas perspectivas, impulsadas por tendencias globales como el auge del turismo regional y la SHEconomy, auguran un 2025 próspero para la economía española.
