El otoño ha llegado a la Cerdanya, y con él, una invitación irresistible para descubrir la belleza de Puigcerdà a través del recorrido del Camí dels Enamorats. Esta ruta, promovida por el grupo de hostelería Esquirol, promete una experiencia inolvidable para quienes deseen disfrutar de los paisajes otoñales más pintorescos de Cataluña.
Enclavado en el idílico corazón de la Cerdanya, el Camí dels Enamorats es una opción perfecta para quienes buscan un contacto más cercano con la naturaleza. La caminata, que inicia en la Plaza de Dionís Puig, bordea el lago de Puigcerdà a lo largo de un trayecto que se extiende entre 3,5 y 4 kilómetros, dependiendo de la variante elegida. Los senderos están flanqueados por árboles ancianos, que en esta época del año se tornan en una sinfonía de colores dorados y rojizos, ofreciendo además vistas imponentes de las cumbres montañosas cercanas, como el Puigpedrós y el Pic dels Moros.
Este camino no solo es un atractivo para los entusiastas del senderismo y las bicicletas, sino también para los amantes de la literatura, pues es mencionado en la famosa novela “El Juego del Ángel” de Carlos Ruiz Zafón. Durante el recorrido, los visitantes pueden esperar una experiencia revitalizante que combina colores otoñales y un aire fresco característico de las montañas.
Además del Camí dels Enamorats, Puigcerdà ofrece su emblemático lago rodeado de jardines que cambian con las estaciones, convirtiéndolo en un lugar ideal para la fotografía, paseos tranquilos o simplemente para relajarse. Desde allí, los aventureros pueden explorar otras rutas y descubrir los encantos escondidos de la Cerdanya.
Tras una jornada de exploración, el Grupo Esquirol invita a los visitantes a deleitar su paladar con la rica gastronomía local. La Taverna del Call en Puigcerdà es reconocida por su menú del mediodía y su oferta de tapas junto a carnes a la brasa, mientras que en Llívia, el Restaurant Esquirol combina tradición y modernidad en el uso de productos locales. Este enfoque culinario asegura una experiencia gastronómica que complementa a la perfección un día de actividades al aire libre.
Para extender la estancia, el Hotel Esquirol en Llívia propone un lugar de descanso en un entorno acogedor, con vistas privilegiadas a los Pirineos. Este alojamiento es ideal para recargar energías en un ambiente familiar tras un día pleno de exploraciones.
El Grupo Esquirol se destaca como referente en la Cerdanya, ofreciendo excelencia tanto en gastronomía como en hospitalidad. Su propuesta invita a los visitantes a sumergirse en la esencia de esta región catalana, asegurando una estancia que mezcla confort, tradición y el esplendor del otoño en su máximo esplendor.
