Un informe de la Fiscalía revela que el presidente ordenó al jefe de contrainteligencia militar que utilizara la fuerza para acceder al Parlamento, instándolo a romper las puertas «con un hacha» si fuera necesario. Este documento, de diez páginas, arroja luz sobre las tensiones políticas y el uso de métodos extremos para cumplir directrices presidenciales, destacando una situación de posible abuso de poder en el manejo de las instituciones democráticas. Este incidente subraya las crecientes fricciones entre el Ejecutivo y el Legislativo, planteando serios cuestionamientos sobre el respeto al marco legal establecido.
Leer noticia completa en El Mundo.