El gobierno de Claudia Sheinbaum ha extraditado a 26 narcotraficantes a Estados Unidos, incluyendo miembros del Cártel de Sinaloa y el CJNG, lo que reafirma su cooperación con la administración de Donald Trump en la lucha contra el crimen organizado. Los reos, que representaban un riesgo para la seguridad pública, enfrentan graves cargos como narcotráfico y crimen organizado en tribunales estadounidenses. La extradición, basada en la Ley de Seguridad Nacional de México, asegura que no enfrentarán la pena de muerte. Esta acción se suma a un acuerdo bilateral reciente para reducir la tensión arancelaria entre ambos países, destacando la colaboración contra la violencia y la impunidad.
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