En enero de 2002, un mitin diseñado para lanzar a Artur Mas como candidato de CiU fue eclipsado por Jordi Pujol, quien reconoció su error en sus memorias. En aquel entonces, CiU estaba en su apogeo, pero más de dos décadas después, la narrativa independentista catalana ha dado lugar a lo que algunos consideran una «agencia de recolocación». Figuras destacadas del movimiento, como Gabriel Rufián y Francesc Homs, han encontrado posiciones consolidadas en el aparato estatal que antes criticaban. Ejemplos incluyen a Ramon Tremosa, ex consejero de Empresa, quien ahora trabaja en Aena, y Sergi Sol, ex jefe de prensa de Junqueras, quien se desempeña en RTVE. El artículo critica cómo antiguos defensores de la independencia han asumido roles dentro del sistema estatal, describiendo una aparente contradicción en sus objetivos y fines personales.
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