El Dr. Eduardo Alegría, destacado cardiólogo de la Policlínica Gipuzkoa y encargado de los chequeos deportivos de los jugadores de la Real Sociedad, ha compartido su visionaria perspectiva sobre el fútbol desde un enfoque de salud cardiovascular y musculoesquelética. A menudo visto como un espectáculo y un negocio, el fútbol no siempre se adapta a todas las edades ni a todas las condiciones físicas, advierte el especialista.
Desde el ámbito de la salud, el Dr. Alegría subraya que el fútbol no es necesariamente el deporte ideal para todos. Resalta que requiere una buena forma física previa, debido a su práctica por intervalos y a los riesgos articulares frecuentes, en particular en rodillas y tobillos. «Para quienes presenten esguinces recurrentes, problemas articulares o sobrepeso, es más recomendable optar por disciplinas que se adapten mejor a su estado físico», aconseja Alegría, sugiriendo que insistir en un deporte que represente un alto riesgo de lesiones o complicaciones cardiovasculares puede ser contraproducente.
El especialista detalla que, si bien el fútbol enfoca en el tren inferior y puede provocar sobrecargas articulares, no es necesariamente el mejor deporte para mejorar la capacidad aeróbica general. Sin embargo, es indiscutible su valor como herramienta de socialización y bienestar emocional. «Favorece el trabajo en equipo y la gestión de emociones, y adaptado adecuadamente, puede ser una excelente forma de ocio saludable», destaca. Alternativas como el «walking football» para personas mayores o el fútbol a siete para grupos reducidos se posicionan como opciones seguras y beneficiosas.
Más allá del ejercicio físico, el Dr. Alegría recalca que el fútbol y otros deportes en equipo enseñan habilidades para manejar triunfos y derrotas, reconocer limitaciones y trabajar hacia un objetivo común. «El objetivo principal no debe ser ganar, sino disfrutar, aprender y compartir», concluye, abogando por un enfoque más inclusivo y consciente del deporte en la vida de las personas.