Carlo Ancelotti, técnico del Real Madrid, encontró en la cantera un salvavidas en Gonzalo, un joven de 20 años que emergió como héroe en el agónico triunfo 3-2 sobre el Leganés en Butarque. El equipo merengue, que había desperdiciado una ventaja inicial con goles de Modric y Endrick, fue rescatado por el tanto de último minuto de Gonzalo, capitalizando un centro de Brahim. Ancelotti, consciente de los duelos venideros frente al Atlético y el Manchester City, realizó rotaciones en el plantel, dejando fuera a figuras clave como Mbappé y Bellingham y experimentando con una defensa central improvisada. Pese a la resistencia del Leganés, el Madrid logró avanzar a semifinales, gracias al decisivo impacto de Gonzalo y la habilidad inspirada de Brahim.
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