La candidata del Partido Popular (PP) y actual presidenta de la Junta de Extremadura, María Guardiola, cerró de manera inusual su campaña electoral recorriendo diversos pueblos de Cáceres y Badajoz sin actos formales. Durante su visita a Almendralejo, interactuó con ciudadanos y recibió tanto apoyo como críticas, siendo acusada por una ciudadana de dejar el campo abandonado. Guardiola, que ha estado avivando las acusaciones de un presunto fraude electoral tras el robo de votos en Correos, denunció la situación ante la Junta Electoral y alertó sobre la amenaza a la democracia. Sin embargo, la Guardia Civil investiga el incidente como un caso de «delincuencia común» enfocada en el robo de dinero. En paralelo, la dirección del PP, apoyada por dirigentes regionales, ha cuestionado el sistema electoral, intensificando la tensión política antes de las elecciones autonómicas.
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