A medida que se aproxima la campaña de la Renta 2024, los inversores que operan a través de plataformas internacionales como Trade Republic deben prepararse para enfrentar las especificidades fiscales que implican sus inversiones. Este neobanco alemán, conocido por sus atractivas rentabilidades, exige a sus usuarios una gestión consciente de sus declaraciones financieras debido a su particular régimen fiscal.
En España, los ingresos obtenidos de intereses y dividendos generados por Trade Republic necesitan ser declarados en el apartado de «Rendimientos de capital mobiliario» del IRPF. A diferencia de las entidades financieras domésticas, esta plataforma no realiza retenciones automáticas sobre los intereses, lo que obliga a los inversores a incorporar el importe bruto en su declaración fiscal. Este detalle, aunque suene complejo, es fundamental para cumplir con la normativa española y evitar situaciones incómodas durante la fiscalización.
Por otro lado, las transacciones que involucran la compra y venta de activos, como acciones o ETFs, también deben reflejarse en la declaración de la renta. Aquí, los inversores tienen la ventaja de poder deducir pérdidas patrimoniales de sus ganancias, un factor decisivo al determinar el montante final a tributar. Como aspecto crucial de esta gestión, deberían incluirse también los costos asociados a las transacciones, pese a que las comisiones de Trade Republic son notoriamente bajas, pues estos se consideran deducibles, permitiendo así una posible reducción de la base imponible.
Un número considerable de inversores podría estar alcanzando umbrales superiores a los 50.000 euros en bienes y derechos en el extranjero, activando la obligación de presentar el modelo 720. Este documento, esencial para reportar bienes ubicados fuera del país, es un requerimiento ineludible para evitar sanciones y asegurar transparencia frente a la Agencia Tributaria.
Con el objetivo de evitar errores que puedan desembocar en problemas fiscales, se recomienda encarecidamente a los usuarios de estas plataformas buscar orientación profesional. Un asesoramiento adecuado puede resultar invaluable para descifrar las complejidades de las obligaciones tributarias internacionales y cumplir con ellas de manera efectiva. Así, la declaración de la Renta 2024 se presenta no solo como un proceso administrativo, sino como una oportunidad para demostrar responsabilidad fiscal y acatar las disposiciones legales con precisión.