Un segundo chat dentro de una aplicación comercial no autorizada para el manejo de información de defensa nacional incluía a 13 personas, entre las que se encontraban la esposa y el hermano del usuario principal. Este hecho plantea preocupaciones sobre la seguridad y la confidencialidad de los datos intercambiados en plataformas no aprobadas para el uso gubernamental, subrayando la necesidad de reforzar las medidas y normativas de seguridad en comunicaciones sensibles para evitar posibles filtraciones de información clasificada.
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