Marius Borg Høiby, hijo de Mette-Marit de Noruega, compareció ante un tribunal en Oslo tras ser arrestado por un presunto caso de violación, además de estar bajo investigación por un segundo caso similar. Durante la audiencia, que se llevó a cabo a puerta cerrada, el tribunal decretó prisión preventiva por una semana, a pesar de que la policía solicitó dos semanas ante el riesgo de manipulación de pruebas. Høiby enfrenta cargos adicionales por conducir sin permiso adecuado e infringir una orden de alejamiento. Su abogado afirma que su cliente es inocente y critica el encarcelamiento. La situación ha generado atención mediática y preocupaciones sobre la violencia de género en Noruega. La familia real ha evitado declaraciones detalladas al respecto, limitándose a reconocer la gravedad de las acusaciones. Marius Borg Høiby, aunque no participa oficialmente en eventos de la familia real, mantiene una relación con sus miembros y no tiene deberes oficiales.
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