El sarcófago de la central nuclear de Chernóbil, ubicado en la Ucrania azotada por la guerra, ha quedado comprometido tras el ataque de un dron, informó el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA). El impacto, que Ucrania atribuye a Rusia, ha degradado la estructura de contención de acero terminada en 2019, aunque no ha causado daños en sus soportes ni sistemas de monitoreo. Rafael Grossi, director general del OIEA, subrayó la urgencia de restauraciones completas para asegurar la seguridad nuclear a largo plazo. A pesar del incidente, no se registraron fugas radiactivas y los niveles de radiación permanecen estables, según la ONU. La estructura de confinamiento se construyó para contener los restos del desastre de 1986, cuando la radiación se propagó por Europa, marcando uno de los accidentes nucleares más graves de la historia.
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