Las explotaciones ganaderas están en alerta debido a un significativo descenso en las actividades, considerado el más severo en décadas, registrado esta semana. Esta caída ha generado inquietud en el sector, ya que se teme que la situación pueda empeorar en los próximos días si las tendencias actuales continúan. La incertidumbre económica global y otros factores adversos están contribuyendo a este panorama desfavorable, generando preocupación sobre las implicaciones futuras para la producción y estabilidad del sector ganadero.
Leer noticia completa en El Mundo.


