Recientes recortes presupuestarios a la Fiscalía Nacional y las policías en Chile han generado controversia, exponiendo una apremiante situación económica en el sector público. Un informe de ejecución presupuestaria 2024 reveló un déficit fiscal del 2,9% del PIB y una deuda pública del 42,3%, superando las previsiones pesimistas. Esto refleja errores en la estimación de ingresos y plantea un escenario de estrés fiscal continuo. La situación limita la capacidad del Gobierno para implementar reformas significativas y obliga a un manejo económico conservador. Enfrentando altos pagos de intereses de deuda y la incertidumbre global, especialmente en torno a la industria del cobre y la inflación persistente, se enfatiza la necesidad de reactivar el crecimiento sostenible para asegurar la estabilidad a largo plazo.
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