Impacto Positivo: Evaluando la Reducción del Desempleo en 2025 y su Influencia en la Tasa de Paro

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Imagen de Axel Buffet

Las cifras recientes de desempleo, que sitúan el número de personas sin trabajo en 2,42 millones y lo colocan como el más bajo para un mes de noviembre desde 2007, cuentan una historia incompleta del mercado laboral actual. Aunque a primera vista podría parecer que se está logrando una recuperación económica significativa, una mirada más profunda revela una realidad menos optimista.

A pesar del descenso en las cifras de desempleo, las afiliaciones a la Seguridad Social han disminuido en aproximadamente 14 400 personas en el mismo periodo. Este fenómeno sugiere que la reducción del paro podría ser el resultado de personas abandonando el mercado laboral, en lugar de un aumento en la creación de empleos estables y de calidad.

Una de las tendencias aparentes es la prevalencia de contratos indefinidos, que representan el 41% de los nuevos contratos. Sin embargo, muchos de estos son a tiempo parcial, de tipo fijo-discontinuo o con jornadas reducidas, perpetuando así el predominio de la contratación temporal. En consecuencia, la estabilidad laboral que muchos anhelan sigue siendo esquiva, ya que los contratos a corto plazo continúan teniendo un peso significativo en el mercado.

Esta situación evidencia que la precariedad en el ámbito laboral persiste, a pesar de las narrativas optimistas en torno a las bajas cifras de desempleo. Para muchos trabajadores, la realidad diaria todavía implica encadenar contratos temporales sin garantías de continuidad ni beneficios laborales robustos. La reducción en los números globales del desempleo no se traduce necesariamente en un bienestar tangible para muchos empleados.

Dada esta situación, se recomienda a los buscadores de empleo adoptar una postura crítica frente a las ofertas laborales. Es crucial evaluar con detenimiento el tipo de contrato, las horas de trabajo y las condiciones laborales ofrecidas. La disminución del desempleo no debe interpretarse como una mejora automática en la calidad de los empleos disponibles, y queda un extenso camino hacia la estabilización y mejora de las condiciones laborales en el país.

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