La Consejería de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural ha llevado a cabo una operación en Níjar, Almería, mediante la cual se incautaron más de 1.000 kilos de pulpo congelado por incumplimiento de la normativa de comercialización. La operación, realizada por la Inspección Pesquera de la Agencia de Gestión Agraria y Pesquera de Andalucía (Agapa), afectó a las instalaciones de un restaurante local.
Durante la intervención, se decomisaron 1.089 kilos de pulpo de la especie Octopus vulgaris y dos kilos de galanes (Xyrichtys Novacula), debido a la ausencia de documentos de trazabilidad necesarios para determinar el origen de los productos y garantizar su seguridad alimentaria. Los inspectores detectaron cámaras frigoríficas y congeladoras que almacenaban estos productos sin identificación válida. Ante esta situación, se requirió al propietario que destruyera los alimentos y presentara un justificante de dicha destrucción por parte de una empresa autorizada.
Esta acción forma parte del Plan de Inspección Pesquera Andaluz (PIPA), que asegura el cumplimiento de la normativa vigente sobre comercialización y restauración. Las infracciones son consideradas graves y pueden conllevar sanciones conforme a la legislación actual.
La operación subraya la responsabilidad de la Junta de Andalucía en el mantenimiento de un sistema de trazabilidad eficaz de los productos pesqueros, asegurando así la seguridad alimentaria mediante una información clara al consumidor. Asimismo, se destaca la importancia del control y vigilancia realizados por la Inspección Pesquera, esenciales para combatir actividades ilegales que amenazan la biodiversidad marina.
Fuente: Junta de Andalucía.
