La frontera entre México y Guatemala vive una creciente tensión por la incursión del crimen organizado, evidenciada esta semana en un violento enfrentamiento entre el Cartel de Sinaloa y sus rivales del Cartel de Chiapas y Guatemala. El choque, ocurrido en las comunidades de Huehuetenango y San Marcos, resultó en la muerte de un civil y dejó a un militar guatemalteco herido. La presencia de los grupos armados ha llevado a las autoridades mexicanas a detener a cuatro miembros del Cartel de Sinaloa en Chiapas, quienes portaban armas y uniformes falsificados. La situación ha generado temor entre los habitantes locales, que perciben un incremento en la violencia en áreas previamente tranquilas. Las autoridades de defensa de ambos países han anunciado planes para reforzar la seguridad en la región fronteriza, mientras patrullajes conjuntos buscan contener la expansión criminal. La muerte de un líder del Cartel de Chiapas y Guatemala ha intensificado la pugna territorial entre las bandas, elevando la amenaza de nuevos ataques en el área.
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