Iñigo Errejón y la Paradoja Política: El Dilema de la Consistencia Ideológica

La supuesta adicción al sexo no justifica conductas machistas ni el acoso, especialmente en figuras públicas y ambientes de poder, donde la sensación de omnipotencia y control agrava la situación. En el caso de Íñigo Errejón, sobre el que pesan acusaciones de machismo, dominación y falta de empatía, se observa un patrón asociado a la llamada “tríada oscura de la personalidad”: narcisismo, psicopatía y maquiavelismo. Estas características, unidas a una presunta adicción sexual y al entorno en posiciones de liderazgo, como en algunos casos, podrían configurarse como un cóctel peligroso. Aunque la hipersexualidad no está catalogada como trastorno en los manuales de psicopatología, se teme que sea utilizada como atenuante en procesos legales. Asimismo, la influencia del entorno y el poder podrían potenciar rasgos como la megalomanía, provocando un deterioro de la integridad personal. Ni el machismo ni el abuso son producto de una adicción, sino reflejos de una conducta y personalidad que el poder puede exponer, según retórica de filósofos como Nietzsche y Ortega y Gasset.

Leer noticia completa en 20minutos.

Titulares Prensa
Titulares Prensa
Resumen de la actualidad y noticias de la Prensa nacional e internacional

Compartir artículo:

Más popular

Más artículos como este
Relacionados

Triunfo de una Potra Salvaje: La Evolución Personal y Profesional de Natalia Oreiro

Isabel Aaiún, nombre artístico de Isabel Casado, se convirtió...

Familiares de Víctimas del Accidente de Helicóptero: ‘Nuestra Pérdida es Inconmensurable’

Los familiares de las víctimas se encuentran en Nueva...