Un informe reciente titulado «Trabajar en las plataformas digitales: ¿Qué sabemos sobre salud y seguridad?», realizado por la Universidad Pompeu Fabra y el Hospital del Mar Research Institute de Barcelona, ha sacado a la luz alarmantes efectos negativos del trabajo en plataformas digitales sobre la salud física y mental de los trabajadores. Este estudio se lleva a cabo dentro del marco del proyecto internacional GIG-OSH, analizando datos de siete países europeos, y apunta a la denominada «economía del cansancio digital» como un factor que afecta profundamente el bienestar de los empleados involucrados.
Los hallazgos del análisis indican una relación directa entre las plataformas de trabajo digitales y elevados niveles de estrés crónico, ansiedad, y una aguda fatiga emocional. Según las entrevistas realizadas, muchos trabajadores sienten estar atrapados en un ciclo de precariedad laboral que, lejos de mejorar su situación, los mantiene en una constante inestabilidad y ansiedad.
El informe destaca que la flexibilidad, frecuentemente promocionada por las plataformas digitales, parece ser más una obligación que una elección deseada. Los trabajadores enfrentan una autonomía limitada que se traduce en inseguridad laboral y fluctuaciones en los ingresos. Ademán, el control algorítmico introduce una nueva forma de subordinación, asignando tareas, evaluando rendimientos y moldeando comportamientos mediante sistemas de reputación.
Estas condiciones tienen un impacto significativo en la salud y el bienestar de los empleados. El informe resalta que el control constante, la imprevisibilidad de ingresos y la intensa competencia afectan negativamente la salud psicosocial de quienes trabajan en estas plataformas. Esto lleva no solo a riesgos físicos, como accidentes y trastornos musculoesqueléticos, sino también a una difuminación de los límites entre la vida laboral y personal, haciendo difícil desconectar y descansar adecuadamente.
El estudio lamenta que la expansión de las plataformas digitales ha cuestionado los principios básicos de la protección laboral moderna, como la clara identificación del empleador y la separación entre el tiempo laboral y personal. Los investigadores subrayan la urgencia de redefinir la gobernanza del trabajo, abogando por una integración de regulación, negociación colectiva y un sólido componente de investigación científica.
A través de métodos cuantitativos y cualitativos, el proyecto GIG-OSH busca ofrecer una visión comparativa sobre cómo la digitalización está transformando el trabajo y la protección social en Europa. Casi cuatro mil trabajadores fueron encuestados y muchas entrevistas se llevaron a cabo con personas de varios sectores, incluidos representantes sindicales y gubernamentales.
Los resultados de esta exhaustiva investigación presentan un escenario preocupante sobre el futuro del trabajo en plataformas digitales y la salud de aquellos que dependen de este modelo económico, destacando la imperante necesidad de enfrentar estos desafíos con un enfoque crítico y proactivo.
