El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, tiene el respaldo legal para continuar vetando a los periodistas de Associated Press (AP) de cubrir eventos clave, luego de que un juez del Distrito de Columbia desestimara la petición de la agencia para suspender la prohibición. La controversia se originó porque AP se negó a adoptar la denominación oficial de «golfo de América», preferida por Trump, y optó por seguir usando «golfo de México» en su guía de estilo. AP ha demandado a tres altos funcionarios de la administración de Trump, alegando violación de la libertad de expresión bajo la Primera Enmienda. Aunque el juez Trevor McFadden, nombrado por Trump, no considera que la agencia haya demostrado sufrir un daño irreparable, sugirió que la Casa Blanca reevalúe su posición por considerarla potencialmente discriminatoria. Por su parte, la Casa Blanca celebra la decisión, reiterando que el acceso a eventos presidenciales es un privilegio y reclamando combatir lo que consideran «noticias falsas».
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