Las autoridades municipales han emitido una alerta a los residentes para que mantengan sus ventanas cerradas debido al riesgo de exposición a «humo tóxico». Las instalaciones afectadas, previamente dañadas por un fenómeno meteorológico conocido como DANA, estaban programadas para ser demolidas. Esta medida de precaución busca proteger la salud de la población ante posibles emisiones peligrosas en la zona.
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