El ministro de Asuntos Exteriores iraní, Abbas Araghchi, ha advertido en Nueva York sobre la posibilidad de una guerra con Israel tras el bombardeo que mató al líder de Hezbolá, Hasán Nasrarlá. Araghchi señala que la muerte de Nasrarlá incrementa la fuerza de Hezbolá y acusa a Israel y Estados Unidos de colaborar en este «crimen». Además, el ministro ha solicitado al secretario general de la ONU, António Guterres, que actúe en nombre de la comunidad internacional para detener las acciones israelíes, criticando la obstrucción de Estados Unidos en el Consejo de Seguridad. Asegura que habrá venganza utilizando todos los medios posibles, marcando la posición iraní más dura hasta la fecha en este conflicto.
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