Irán mostró sus nuevas armas, el dron Shahed-136B y el misil balístico Yihad con un alcance de 1.000 kilómetros, durante un desfile militar en Teherán conmemorando la guerra entre Irán e Irak (1980-1988). El evento ocurre tras una reciente oleada de misiles balísticos lanzados sobre Israel. A pesar de sanciones occidentales, Irán ha desarrollado el arsenal más sofisticado de misiles balísticos de la región y drones avanzados, destacando por su capacidad disuasoria y producción industrial de armamento. La estrategia militar iraní ha evolucionado con el tiempo para enfocarse en capacidades asimétricas, como drones y misiles, compensando sus debilidades en armamento convencional avanzado. Además, Irán ha exportado su tecnología militar a varias naciones y grupos aliados, y recientemente ha apoyado militarmente a Rusia en el conflicto con Ucrania.
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