En la 39ª edición de los Premios Goya, Isaki Lacuesta y Pol Rodríguez fueron galardonados con el premio a la mejor dirección por su trabajo en «Segundo Premio», una emotiva película que elude clichés al explorar el drama con sensibilidad y destreza. Este logro destaca en una gala marcada por una inclinación hacia piezas trágicas sobre comedias, a pesar de la presencia de varios títulos humorísticos este año. La ceremonia, presentada por Maribel Verdú y Leonor Watling, refleja la visión y planificación del dúo de directores, quienes se unen a la lista de notables cineastas españoles reconocidos por la Academia, como J.A. Bayona y Fernando León de Aranoa. El premio resalta una tendencia inusual de candidatos en equipos, como en el caso de «Marco», dirigida por Aitor Arregi y Jon Garaño. La mayoría de los nominados, a pesar de su talento, aún no han recibido reconocimiento suficiente en la categoría principal, excepto Pedro Almodóvar, quien ya cuenta con múltiples galardones.
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