El ejército israelí confirmó que efectuó disparos de advertencia durante un incidente en el norte de Gaza, donde miles de palestinos esperaban la llegada de camiones de ayuda. Según autoridades en Gaza, el ataque resultó en al menos 60 muertos y 150 heridos, cifras desmentidas por Israel. Los disparos ocurrieron cerca del puesto de Zikim cuando una multitud se acercó al checkpoint en Beit Lahia, donde camiones con harina fueron saqueados. Tras el tiroteo, los hospitales de Gaza reportaron la llegada de decenas de cadáveres y heridos. El ejército israelí advirtió a los habitantes de evitar ciertas áreas debido a operaciones militares en curso. En contraste, el Papa León XIV criticó el «castigo colectivo» y el uso indiscriminado de fuerza, pidiendo respeto al derecho humanitario en Gaza, tras un ataque a una iglesia católica en el enclave.
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