El Grumman F-14 Tomcat, célebre por su aparición en Top Gun, resurge como símbolo en el conflicto entre Israel e Irán. Este caza, legado de la era del sha, fue parte de los recientes ataques israelíes, que destruyeron dos unidades en Teherán. Estos sucesos reflejan la escalada bélica, con Israel explotando su superioridad aérea y militar, respaldado por Estados Unidos. Irán, con un poder militar inferior y una economía afectada por sanciones, depende de misiles balísticos y drones. Mientras el conflicto entre ambos países se intensifica, los expertos señalan que una solución diplomática sería la única vía para resolver la amenaza nuclear iraní sin una intervención militar total.
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