A casi dos meses del inicio de la incursión terrestre en el Líbano, Israel y el Líbano parecen estar cerca de aceptar una propuesta de alto el fuego impulsada por Estados Unidos, según se desprende de las declaraciones recientes del embajador israelí en EE.UU., Michael Herzog. El plan, que podría concretarse en las próximas horas, contempla un cese de hostilidades por dos meses, durante los cuales las fuerzas israelíes se retirarían del Líbano y Hizbulá cesaría su presencia armada en la frontera sur, siendo reemplazados por el ejército libanés y tropas de la ONU. No obstante, persisten desacuerdos, especialmente en torno a las garantías exigidas por Israel y la composición del comité internacional que vigilaría el acuerdo. Las tensiones han causado más de 3.500 muertes libanesas y el desplazamiento de una cuarta parte de la población, mientras la comunidad internacional sigue evaluando el impacto de este posible alto el fuego en la región.
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