El ascenso de James Gunn a la presidencia de DC, junto a Peter Safran, desató cambios significativos en la compañía, que comenzaron con la cancelación de la secuela de «El hombre de acero», frustrando las esperanzas de Henry Cavill de retomar su papel como Superman. A pesar de las complicaciones generadas por el regreso de Cavill en «Black Adam», Gunn y Safran decidieron reiniciar el universo de DC, lanzando una nueva película de Superman, ahora protagonizada por David Corenswet. Gunn ha expresado su simpatía hacia Cavill, destacando su elegancia al aceptar la situación y no descarta colaborar con él en el futuro. Mientras tanto, Jason Momoa también se reinventa en el universo DC, pasando de Aquaman a interpretar a Lobo en próximas producciones.
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