Joe Biden, en su esfuerzo por apoyar a Kamala Harris en la próxima elección presidencial, se unió a la campaña desde el Día del Trabajo en Pittsburgh. Celebrado como el presidente más prosindical, ha buscado reforzar el voto de los trabajadores sindicados en Estados clave como Pensilvania, Wisconsin y Míchigan. Biden ha dejado claro que, aunque estará en un segundo plano, hará todo lo posible para ayudar a Harris. Mientras Harris y Tim Walz participaron en eventos sindicales, Trump tomó una pausa, pero se prepara para reanudar su campaña. En su discurso, Harris destacó la importancia de los sindicatos y criticó a Trump, reforzando la visión de continuidad y cambio de su campaña.
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