Jonas Vingegaard, campeón de la Vuelta a España, mostró su habilidad al frente del pelotón, aunque los festejos en Cibeles se cancelaron debido a protestas pro-Palestina en Madrid. Tras vencer en dos Tours de Francia, el danés regresó decidido a la Vuelta, tras una preparación cuidadosa y momentos de descanso familiar. A lo largo del recorrido, Vingegaard destacó con su liderazgo y apoyo del equipo Visma, especialmente en la ascensión a Valdezcaray. Aunque Almeida se mostró fuerte, una pequeña gripe no detuvo a Vingegaard, quien aseguró su victoria a pesar de las interrupciones en la última etapa. El equipo celebró en privado, brindando por el «campeón sin fiesta».
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