En una reciente entrevista en el programa ‘Más de Uno’ de Onda Cero, Juanma Moreno, presidente de la Junta de Andalucía, abordó temas cruciales que afectan tanto a su comunidad como al panorama político nacional. Moreno cuestionó hasta dónde podría llegar «el sanchismo» para mantenerse en el poder, evidenciando su preocupación por las prácticas del actual gobierno.
Moreno se refirió al «cupo independentista» gestionado por Pedro Sánchez y Yolanda Díaz, expresando la necesidad de un PSOE que sea verdaderamente progresista y que defienda una visión coherente del Estado. Indicó que la política actual, caracterizada por un liderazgo cambiante y una falta de dirección, no es sostenible, y enfatizó la importancia de consolidar un proyecto político de largo plazo, liberal y centrista, en un momento en que Andalucía muestra signos de crecimiento.
Un punto central en sus declaraciones fue la obsesión de Sánchez por aferrarse al poder, lo que, según Moreno, implica una priorización del interés personal sobre el bienestar general. Criticó comportamientos que, a su juicio, socavan los principios democráticos, sugiriendo que tal obsesión impide una gobernanza efectiva.
En cuanto a la deuda de las comunidades autónomas, Moreno argumentó que el verdadero problema no es la deuda en sí sino la financiación adecuada de las regiones. Afirmó que la situación de Cataluña, que tiene un nivel de deuda comparable al de Andalucía, es una carga que Sánchez intenta ocultar. El presidente andaluz destacó que cualquier condonación de deuda enviaría un mensaje negativo a los ciudadanos y municipios sobre la responsabilidad fiscal. Insistió en que Andalucía no se implicará en lo que él considera un juego político relacionado con la deuda.
Moreno subrayó la necesidad de un nuevo modelo de financiación que sustituya el pacto de 2009, que dejó a Andalucía con una notable infrafinanciación. Aseguró que es indispensable contemplar un fondo de compensación mientras se negocia este nuevo modelo.
Otro punto de su crítica se centró en el acuerdo fiscal entre el PSC y ERC, apuntando que tal acuerdo podría desestabilizar la cohesión nacional, desdibujando el rol del Estado como garante de la equidad y la redistribución de recursos. Consideró que un enfoque fragmentado perjudicaría a comunidades como Andalucía, que no cuentan con los mismos recursos ni la misma capacidad económica que Cataluña.
Moreno también se refirió a las responsabilidades del gobierno central en términos de gestión migratoria. Criticó la falta de comunicación entre el gobierno y las comunidades autónomas en relación con la llegada de inmigrantes, calificando esta falta de aviso como una lealtad institucional deficiente. Subrayó la necesidad de tener una política migratoria clara y regulada que evite el descontrol actual, el cual consideró uno de los grandes fracasos de Sánchez.
Por último, Moreno concluyó señalando que la bajada de impuestos en Andalucía ha resultado en un aumento considerable de la recaudación y ha contribuido a fomentar una economía más activa, lo que contrasta con las políticas más restrictivas que podrían perjudicar a las pequeñas y medianas empresas de la región.
Así, Juanma Moreno emergió como una voz crítica no solo sobre la situación andaluza, sino también con respecto a la dirección que toma la política nacional, demandando un diálogo sincero y constructivo que priorice el interés de los ciudadanos.
Fuente: Partido Popular Andalucía