El Juzgado de Instrucción número cuatro de Granada ha decidido suspender provisionalmente la orden de restitución emitida por los tribunales de Cagliari, Italia, que obligaba a Juana Rivas a devolver a su hijo menor a su padre, Francesco Arcuri. Esta medida se produce tras la solicitud de Rivas y de la Fiscalía, con el objetivo de proteger al menor. La decisión se toma en el contexto de una audiencia donde el niño fue escuchado por la juez y el fiscal en dependencias judiciales. Ahora, el caso podría pasar al Juzgado de Violencia sobre la Mujer número dos de Granada, debido a una denuncia previa de malos tratos presentada por Rivas contra Arcuri. Aunque dicha denuncia fue archivada, la decisión está siendo apelada, lo que mantiene el procedimiento abierto. Rivas había buscado medidas de protección para evitar el regreso de su hijo a Italia, alegando riesgos para su seguridad, y su representación legal ha insistido en que el niño sea escuchado en el marco de sus preocupaciones por su bienestar.
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