El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, enfrenta una creciente presión para reformar su gabinete en medio de escándalos por acoso sexual y corrupción. La viceprimera ministra y socia de coalición, Yolanda Díaz, ha exigido cambios profundos, pero Sánchez ha descartado remodelaciones, optando por medidas disciplinarias contra los implicados. Oriol Junqueras, líder de Esquerra Republicana, ha urgido al PSOE a tomar acciones concretas contra la corrupción sistémica y el acoso, enfatizando la necesidad de fortalecer la democracia. Mientras tanto, el ministro de Cultura, Ernest Urtasun, y otros miembros de la coalición han exigido al presidente explicaciones y la implementación de medidas anticorrupción, destacando el cansancio ciudadano ante las repetidas denuncias de corrupción en los grandes partidos.
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