Valladolid se convirtió en el epicentro de la cirugía moderna al acoger la XXV Reunión Nacional de Cirugía, organizada por la Asociación Española de Cirugía (AEC). El evento, que se llevó a cabo entre el 4 y el 7 de noviembre, reunió a más de 1.650 cirujanos bajo el lema «Cirug.I.A: Innovar, Aprender, Curar», centrando su atención en los últimos avances tecnológicos en el campo quirúrgico.
Durante los días del congreso, los participantes exploraron temas punteros como la cirugía digital, la robótica y la inteligencia artificial, sin dejar de lado la realidad aumentada y la telecirugía. El programa se enriqueció con 37 mesas redondas, 11 conferencias magistrales y más de 200 ponentes, incluyendo la participación de 20 renombrados especialistas internacionales. Las actividades se desarrollaron en la Sala Sinfónica de Valladolid, un auditorio con capacidad para 1.200 personas.
Uno de los logros más destacados de la reunión fue la aceptación de 1.276 comunicaciones de las 1.667 enviadas, distribuidas en diferentes formatos y modalidades. Se realizaron 107 sesiones que combinaron formación teórica y práctica para fomentar el intercambio de experiencias entre los asistententes.
La presidencia del evento estuvo a cargo de los doctores David Pacheco Sánchez, Miguel Toledano Trincado y Vicente Simó Fernández, quienes enfatizaron la relevancia de la tecnología en la práctica quirúrgica actual y futura. Especial atención se dio a cómo la inteligencia artificial puede revolucionar la cirugía, con un enfoque claro: mantener al paciente como eje central.
El congreso también fue escenario de reconocimientos, nombrando nuevos Miembros de Honor de la AEC a destacados cirujanos como el Dr. Pedro Ruiz López y la Dra. Suzanne Gisbertz. Además, se entregaron 64 becas dirigidas a especialistas, residentes y proyectos de investigación, premiando las innovaciones más destacadas en cirugía avanzada.
El Dr. David Plazas López fue galardonado por el mejor Caso Clínico Inédito gracias a su trabajo sobre la prevención de fugas post-tiroidectomía paliativa. Asimismo, el concurso de fotografía de la AEC premió imágenes que reflejan la realidad del ámbito quirúrgico.
La reunión no solo fortaleció a Valladolid como un importante centro de aprendizaje e intercambio en el ámbito quirúrgico, sino que también promovió la cooperación entre profesionales para elevar la calidad de la atención a los pacientes. Con énfasis en la cirugía digital y la investigación, el evento dejó una marca perdurable en la evolución del campo quirúrgico.
