Dinamarca ha convocado al embajador de Estados Unidos en Copenhague luego de que el gobernador de Luisiana, Jeff Landry, fuera nombrado como enviado especial para Groenlandia, un territorio autónomo danés. Este nombramiento, visto como un movimiento para integrar Groenlandia a Estados Unidos, ha desatado una controversia diplomática, con el ministro de Exteriores danés, Lars Løkke Rasmussen, calificándolo de «inaceptable». La primera ministra danesa, Mette Frederiksen, y el presidente groenlandés, Jens-Frederik Nielsen, defendieron la integridad territorial de Groenlandia y rechazaron cualquier intento de anexión. Alemania también mostró su apoyo a Dinamarca, ratificando la indiscutible integridad territorial del país. La situación se enmarca en el reiterado interés de Donald Trump por Groenlandia, vista como estratégica para la seguridad nacional de Estados Unidos. Pese a esta controversia, la población groenlandesa sigue rechazando la idea de formar parte de Estados Unidos.
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