La Consejería de Sostenibilidad y Medio Ambiente de la Junta de Andalucía ha declarado el estado de emergencia cinegética temporal en toda la comunidad autónoma, en respuesta a la amenaza que supone la aparición de la Peste Porcina Africana (PPA). Esta medida se ha implementado tras el reciente brote de la enfermedad en Cataluña y busca intensificar el control sobre las poblaciones de jabalíes y cerdos asilvestrados, utilizando la caza como herramienta clave para prevenir la propagación del virus.
En este contexto, la Federación Andaluza de Caza ha propuesto diversas modalidades de control poblacional, que han sido integradas en la resolución. Entre ellas, se destaca la habilitación del uso de aguardos y aguardos nocturnos a lo largo de toda la temporada. Además, y de manera excepcional, se permitirá el uso de sustancias atrayentes no contaminantes y una aportación controlada de alimento vegetal o pienso cerca de los puestos de caza, sin que esto implique un impacto negativo en el entorno natural.
La nueva normativa también autoriza el uso de visores digitales, nocturnos o térmicos, exclusivamente para los aguardos nocturnos, con el objetivo de mejorar la precisión y seguridad durante las cacerías. Otro elemento fundamental es la regulación del uso de capturaderos en terrenos tanto cinegéticos como no cinegéticos, asegurando que su instalación sea comunicada a los agentes de medio ambiente correspondientes.
El Instituto Andaluz de Caza y Pesca ha subrayado la importancia de la caza en el mantenimiento del equilibrio ecológico y en la detección temprana de enfermedades. Cada año, los cazadores andaluces capturan más de 80,000 ejemplares, colaborando de manera crucial con las autoridades en el control de enfermedades y poblaciones.
José María Mancheño, presidente de la Federación Andaluza de Caza, ha reafirmado el compromiso de las 1,400 sociedades de cazadores en Andalucía para realizar esta tarea con responsabilidad. Además, ha recordado la continua colaboración de los cazadores con el Plan de Vigilancia Epidemiológica de la Junta de Andalucía, instando a reportar cualquier ejemplar sospechoso.
Con esta resolución, la Junta de Andalucía resalta el papel vital de la caza no solo para el control de especies, sino también en situaciones de riesgo sanitario, reafirmando su compromiso con la gestión sostenible y equilibrada del medio natural.
Fuente: Federación Andaluza de Caza.








