La Diputación de Málaga ha hecho una inversión significativa en el Programa de Fomento de Empleo Agrario (PFEA), cofinanciando con 3,2 millones de euros la ejecución de un total de 292 intervenciones, que incluyen 244 obras y 48 servicios, a lo largo del último año. Este esfuerzo, realizado en colaboración con fondos del Gobierno central, la Junta de Andalucía y los ayuntamientos, ha supuesto un importe global de 33,2 millones de euros y ha permitido la contratación de cerca de 15.000 personas desempleadas, destacando la relevancia de este programa en la generación de empleo, especialmente en el medio rural.
El presidente de la Diputación de Málaga, Francisco Salado, presentó un balance de las actividades desarrolladas en el marco del PFEA, enfatizando que se trata de proyectos aprobados en 2023 cuyo desarrollo se ha llevado a cabo en el presente año. Salado resaltó la vital importancia de este programa para los municipios, no solo por su capacidad de generar empleo, sino también por su contribución a la modernización de infraestructuras y a la mejora de servicios públicos que ofrecen los ayuntamientos a sus ciudadanos. Además, señaló que el PFEA actúa como un mecanismo para mitigar las desigualdades entre áreas urbanas y rurales, favoreciendo así el desarrollo y la calidad de vida en los pueblos, y ayudando a combatir la despoblación.
Uno de los aspectos destacados por Salado ha sido el esfuerzo de la Diputación en la redacción de proyectos, donde se han elaborado 95 iniciativas para 39 municipios que solicitaron este apoyo. Este trabajo incluye la confección de 87 proyectos de obras y 8 de servicios, lo que se traduce en una clara evidencia del compromiso de la Diputación por respaldar a los ayuntamientos, especialmente aquellos con menos recursos técnicos y financieros. Este apoyo se materializa en una ayuda técnica que permite la elaboración de proyectos por valor de nueve millones de euros.
En el ámbito técnico, los proyectos redactados se orientan mayoritariamente hacia la proyección de edificaciones e infraestructuras, abarcando tareas como cálculos de estructuras, instalaciones eléctricas y mejoras energéticas. La utilización de tecnología BIM, una metodología que facilita la planificación y ejecución en entornos 3D, ha sido clave en el proceso, permitiendo a la Diputación mantener un estrecho contacto con los responsables locales para alinear el diseño de las obras con las necesidades específicas de cada municipio.
Además de la redacción de proyectos, la Diputación se encarga de la gestión y coordinación del PFEA en la provincia. En este sentido, se han transferido a los ayuntamientos un total de 9,8 millones de euros para cubrir los costos de los materiales necesarios para las obras, de los cuales 6,6 millones provienen de aportaciones de la Junta de Andalucía y 3,2 millones de la Diputación. Salado destacó que esta última cifra supera en casi un millón de euros la cantidad que correspondía a la Diputación según el marco de financiación del programa, lo que evidencia su compromiso con los municipios.
El personal del servicio de Fomento de Empleo Agrario también proporciona asesoría técnica a los municipios durante la ejecución de las obras y se ocupa de la justificación final de los proyectos que reciben subvenciones. De esta forma, se garantiza que cada año se puedan hacer realidad nuevos proyectos con financiación del PFEA, contribuyendo a diversas mejoras en la infraestructura pública.
Estos proyectos incluyen mejoras en el arreglo de calles, plazas y caminos, la modernización de edificios municipales e instalaciones deportivas, así como la eliminación de barreras arquitectónicas y la adecuación de espacios verdes. En general, esta iniciativa no solo representa una inyección económica crucial para la creación de empleo, sino que también se traduce en un impacto positivo en las comunidades locales, contribuyendo al desarrollo integral del entorno rural de Málaga.
Fuente: Diputación de Málaga.