El Papa Francisco manifestó su rechazo tanto al aborto como a las políticas antiinmigrantes durante su conferencia de prensa en un vuelo de regreso a Roma desde Singapur. En respuesta a preguntas sobre las elecciones presidenciales en Estados Unidos, el pontífice criticó a ambos candidatos—Kamala Harris y Donald Trump—por sus posturas sobre estos temas, calificando el aborto de «asesinato» y la expulsión de migrantes como «maldad». Invitó a los votantes a elegir «el mal menor» según su conciencia. Estas declaraciones se suman a la posición ya conocida del Papa en contra de ambas prácticas, subrayada anteriormente en documentos del Vaticano y declaraciones pasadas. Las reacciones a los comentarios del Papa varían ampliamente, reflejando la polarización en torno a estos temas.
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