La magistrada ha puesto en entredicho la efectividad del aviso emitido tras lamentar la trágica situación en la que la mayoría de las víctimas fueron personas mayores, lo que sugiere una respuesta inadecuada y tardía ante el evento. La crítica se centra en la gestión de la alerta y la falta de medidas oportunas que pudieran haber mitigado el impacto sobre este grupo vulnerable. Ante la gravedad de los hechos, se ha iniciado una revisión de los protocolos de emergencia para evitar que errores similares se repitan en el futuro.
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