La guerra en Ucrania ha destacado la importancia de los drones en el conflicto moderno, marcando un cambio significativo en las tácticas militares. Los ucranianos han utilizado con éxito drones aéreos y navales para contrarrestar las fuerzas rusas, desactivando la capacidad de la armada en el Mar Negro. La OTAN, tomando nota de estas tácticas, ha llevado a cabo el ejercicio Bold Machina 25 en Den Helder, Países Bajos, donde soldados de élite recibieron formación para diseñar y utilizar drones navales mediante la impresión 3D y materiales asequibles. Este entrenamiento, liderado por el Comando de Fuerzas de Operaciones Especiales Aliadas de la OTAN (SOFCOM), busca capacitar a las tropas para enfrentar enemigos superiores con recursos limitados. La iniciativa subraya la necesidad de adaptarse rápidamente a las nuevas tecnologías en el campo de batalla, enfatizando la importancia de la innovación y el aprendizaje constante. Según expertos de la OTAN, el fracaso en este contexto no es definitivo si se extraen lecciones valiosas para el futuro.
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