Francisco José García Almodóvar, exenfermero de Ciudad Real, halló un nuevo propósito al descubrir el arte floral en un momento de incertidumbre personal. Inspirado por el festival Flora de Córdoba, García se adentró en el mundo del ikebana, un arte japonés que ve las flores como medio de meditación, transformando su vida. Ahora, como fundador del estudio Ikefrana, combina proyectos comerciales y experimentales, promoviendo la sostenibilidad y la observación de la naturaleza. Su obra, basada en el principio del minimalismo y el wabi-sabi, busca que el público reflexione sobre el presente y la fragilidad del tiempo a través de las flores. Este enfoque será parte de su exposición en el festival Flora, donde ganó la convocatoria Patio Talento.
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