Este miércoles entraron en vigor los primeros aranceles de Donald Trump que impactarán a la Unión Europea, centrándose en el aluminio y el acero. Estas medidas forman parte de la estrategia comercial de Trump, quien ha usado la amenaza de aranceles para negociar. Mientras tanto, la UE planea represalias, considerando imponer aranceles a productos estadounidenses como el aluminio, textiles y productos agrícolas, además de afectados anteriormente como el bourbon y las motos Harley-Davidson. Con un intercambio comercial significativo entre ambas regiones, estas medidas generan preocupación sobre su impacto económico y sobre la creciente incertidumbre política y geoeconómica. La Cámara de Comercio de EE.UU. y el Consejo de Bebidas Destiladas han criticado estas decisiones, sugiriendo la necesidad de una solución negociada para evitar daños mayores.
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